El televisor disfruta por supuesto de la mayoría de cualidades presentes en la gama tope de la casa, incluyendo el soporte Multi-View que ya conocimos en la pasada IFA 2012 (gracias al cual, con sus correspondientes gafas, dos usuarios pueden ver dos cosas distintas al mismo tiempo); y todo ello sin olvidar, claro está, lo que la hace más especial: la presencia de la tecnología Super OLED, que cuenta con auto emisión de sub-píxeles RGB ubicados directamente en el panel de la pantalla, emitiendo cada uno su propia luz.
Puesto de nuevo el caramelo en la boca, esperemos que Samsung no se haga de rogar mucho más hasta señalar con el dedo un día en el calendario (y, de paso, desvelar precios definitivos para los diferentes mercados).